Este es uno de los ejercicios más grandes de la República Checa este año y durará hasta el 19 de septiembre.
Participarán República Checa, Eslovaquia, Estados Unidos, Alemania, Hungría, Lituania y Estonia.
El propósito del ejercicio es determinar la interacción de los observadores de objetivos en tierra con las tripulaciones de los aviones y helicópteros de combate, así como con los comandantes de otras unidades involucradas en las maniobras.
Las bases aéreas del país albergarán:
-Al bombardero estratégico B-52;
-Al dron MQ-9 Reaper US Air Force;
-A los aviones Eurofighter, Tornado, Learjet y PC-9B de la Fuerza Aérea Alemana;
-A los cazas supersónicos Jas-39 Gripen;
-El avión de ataque ligero L-159 Alca;
-Los helicópteros Mi-24 y Mi-171Sh de la Fuerza Aérea Checa.
Mientras tanto, en Bielorrusia, en la frontera con Lituania, también han comenzado los ejercicios militares planificados, que durarán hasta el 20 de agosto.
Las fuerzas armadas de la República de Bielorrusia practicarán repeler un ataque de un enemigo convencional desde Occidente. Las unidades de las fuerzas de misiles, junto con la artillería, llevarán a cabo las tareas de intercepción en servicio de alerta en los objetivos designados.
El presidente Alexander Lukashenko dio la orden de trasladar a los paracaidistas a Grodno hasta que se estabilice la situación en la parte suroeste del país.
Dijo que estaba preocupado por la situación que se desarrolla cerca de Polonia y Lituania: “Por lo tanto, pediré además, dada la tensa situación en la frontera occidental, que se transfiera la brigada aerotransportada de Vitebsk a Grodno”.
