La coalición saudí anunció haber atacado localidades en el norte, oeste y en la capital de Yemen, Saná. La Organización de las Naciones Unidas (ONU) denuncia que los bombardeos alcanzaron el puerto de granos de Al-Salif, que es una zona neutral bajo el auspicio de este organismo internacional tras el acuerdo de Estocolmo firmado en 2018, en Suecia.
Las autoridades yemeníes consideraron los ataques parte de una guerra económica saudí contra el pueblo yemení.
Ante la agudización de la crisis en Yemen, los analistas ponen en entredicho el papel de la ONU u otros organismos internacionales para paliar la crisis humanitaria.
La nueva ola de crímenes saudíes se produce un día después de que el Ejército yemení diera un balance total de los bombardeos de la coalición agresora. La campaña militar saudí ha devastado la infraestructura, los hospitales y las escuelas, entre otros objetivos civiles en Yemen.
La ONU ha estimado que esta guerra ha dejado más de 233 mil muertos. El bloqueo saudí ha causado, además, en Yemen, una situación que la ONU considera el peor desastre humanitario del mundo.
