La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, opinó este domingo que la queja presentada por la Unión Europea ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) para denunciar la política de sustitución de importaciones de Moscú, representa un intento de tomar represalias por su propia carencia de visión y de autonomía.
Las palabras de Zajárova son una respuesta a la queja elevada por la UE ante la OMC, por las medidas de Moscú que —según Bruselas— «perjudican seriamente a las compañías de la UE a la hora de vender productos y servicios a las empresas relacionadas con el Estado de Rusia y otras entidades a través de adquisiciones comerciales».
Esta semana, varios medios rusos reportaron que la UE exige de Rusia una compensación por un monto total de 290.000 millones de euros (unos 328.388 millones de dólares). Las noticias fueron desmentidas por el Ministerio de Desarrollo Económico ruso, que precisó que las exigencias de la UE en el marco de la queja se limitan a la cancelación o modificación de ciertas medidas que, supuestamente, violan las reglas de la OMC.
«Ahora sabemos en cuánto valoró la Unión Europea la estupidez y carencia de autonomía de sus élites políticos», escribió Zájarova este sábado en su cuenta de Telegram, donde recordó que «la sustitución de importaciones fue una respuesta a las sanciones de la UE contra Rusia».
Medidas sadomasoquistas
«Bruselas nos contó durante mucho tiempo que nuestro país había sido ‘castigado severamente’. No solo ‘severamente’, sino de una manera sadomasoquista», destacó.
Por otra parte, la vocera recalcó que la decisión de la UE de imponer las sanciones no fue autónoma, dado que fue tomada bajo la presión de Washington, pese al riesgo de pérdidas económicas que suponía para el Viejo Continente.
«Los países de la UE aceptaron esto solo bajo la fuerte presión de Washington y esta presión se debía a la aspiración de EE.UU. de ocasionar el mayor daño posible a la economía rusa, como subrayó Joe Biden», dijo Zajárova, refiriéndose al entonces vicepresidente estadounidense. «No precisó, sin embargo, cuánto pagará Bruselas por esto», agregó.
Las sanciones europeas contra Rusia, destinadas a afectar a su sector comercial, económico y militar, fueron impuestas en 2014 en relación con los eventos al este de Ucrania y en Crimea.