El 30 de julio, un alto dirigente del movimiento libanés Hizbulá, Fuad Shukr, fue asesinado en Beirut. Unas horas más tarde, el líder político del movimiento palestino Hamás y principal negociador del movimiento en las conversaciones de alto al fuego con Israel, Ismaíl Haniyá, fue asesinado en Teherán. El gesto fue interpretado por muchos analistas como una provocación capaz de escalar significativamente el conflicto en Gaza. Pero, ¿cuándo responderá Irán?
“La verdadera pregunta no es qué hará Irán, la pregunta es: ¿qué hará Estados Unidos?”, se cuestionó Mohamad Marandi, profesor de Literatura Inglesa y Orientalismo en la Universidad de Teherán, en una conversación con Sputnik. “Si Estados Unidos se involucra en la guerra, entonces creo que será Estados Unidos [quien] perderá más que nadie”, agregó.
Marandi explicó que una guerra entre Estados Unidos junto a Israel por un lado e Irán por el otro se expandiría regionalmente e incluiría a dictadores aliados de Estados Unidos que serían vistos como cómplices de dicho país.
“Así que no habrá más instalaciones de gas o petróleo en la región del golfo Pérsico y será posible exportar cualquier cosa. Así que esto llevaría a un colapso económico mundial”, destacó Marandi. “Conducirá a una depresión profunda, algo que no hemos experimentado antes en los últimos siglos, incluso en la década de 1930”, añadió.
A Irán no le queda más remedio que responder con más contundencia de la que lo hizo tras el ataque aéreo israelí contra el consulado iraní en Damasco, en Siria. Ese ataque, en el que Irán utilizó cientos de aviones no tripulados para abrumar las defensas aéreas israelíes para luego golpear objetivos militares con misiles, fue descrito como moderado fuera de los medios de comunicación occidentales e israelíes. Menos de cuatro meses después, Israel volvió a atacar a Irán.
“Por definición, significa que no era adecuada (la respuesta) para una solución permanente. Así que los iraníes van a tener que golpear más fuerte”, explicó Marandi.
A pesar de la carta firmada por Estados Unidos y algunos países europeos pidiendo a Irán que dé marcha atrás, la mayor parte del mundo entiende que el país se ha mostrado moderado y razonable en comparación con sus homólogos israelíes. Esto debería aislar aún más a Estados Unidos si se une a Israel en una guerra contra Irán, lo que agravaría sus problemas económicos si se produce un colapso mundial.
“¿Cómo se vería eso para Estados Unidos, cuando Estados Unidos va a pelear la guerra en nombre de un régimen genocida y luego derribar la economía mundial? Será devastador para Estados Unidos porque nadie simpatizará con él”, agregó Marandi.
“La cuestión es que están arrastrando al mundo a una catástrofe. Este genocidio tendrá consecuencias. Y una guerra ampliada tendrá enormes consecuencias”, concluyó.