El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, a través de su Embajada en Francia, ha tomado las medidas necesarias para aclarar la situación en torno al empresario de origen ruso Pável Dúrov, anunció la portavoz de la Cancillería, María Zajárova, al comentar el arresto del cofundador de Telegram en París.
La vocera aseguró que la Embajada rusa “inmediatamente” activó las labores correspondientes, “tal y como está estipulado” en caso de recibirse información sobre la detención por las autoridades locales de un ciudadano ruso.
Zajárova también recordó que cuando en el 2018 la Justicia rusa ordenó bloquear Telegram por denuncias legislativas debido a los parámetros técnicos del sistema de cifrado, un grupo de 26 ONGs, entre ellas Human Rights Watch, Amnistía Internacional, Reporteros sin Fronteras, el Comité para la Protección de los Periodistas y otras, condenaron esa decisión.
“Estas ONG occidentales pidieron a las autoridades rusas que dejaran de poner obstáculos al trabajo de Telegram. Pidieron a la ONU, al Consejo de Europa, la OSCE, la Unión Europea, EE.UU. y los gobiernos de otros países que se opusieran a las acciones de Rusia y protegieran los derechos fundamentales de libertad de expresión y privacidad“, comentó la vocera.
“Publico una captura de pantalla de todas las estructuras occidentales que se pronunciaron en aquel momento, incluso con un llamamiento colectivo. ¿Creen que esta vez harán llamamientos a París y exigirán la liberación de Dúrov, o se tragarán sus lenguas?“, señaló.
Detención de Dúrov
Dúrov, de 39 años, fue detenido al bajar de su avión privado, tras llegar de Azerbaiyán, en la pista del aeropuerto de París-Le Bourget. Tenía una orden de búsqueda francesa emitida por la oficina de menores (OFMIN) de la Dirección Nacional de Investigación Criminal francesa sobre la base de una investigación preliminar.
La Justicia francesa considera que la falta de moderación y la cooperación de Pável Dúrov con las fuerzas del orden, así como las herramientas que ofrece Telegram (número desechable, criptografía, etc.), le convierten en cómplice de tráfico de drogas, delitos de pedofilia y fraude.
Está previsto que el jefe de Telegram, que desde el 2021 tiene ciudadanía francesa, comparezca ante un juez de instrucción esta noche, y el domingo podría ser acusado de una serie de cargos de terrorismo, tráfico de drogas, complicidad, fraude, blanqueo de capitales, contenido pedófilo, entre otros.
