A medida que la crisis humanitaria de Yemen se profundiza, millones de personas desplazadas enfrentan peores condiciones de vida, alertó la institución en su último reporte sobre la situación en este país árabe.
“Con 4,5 millones de personas desplazadas y más de 18,2 millones que necesitan ayuda humanitaria, la escala de la crisis es inmensa”, subrayó.
El reporte cubre la primera mitad de 2024 y se basa en encuestas a más de 47 mil familias, señaló.
Acnur destacó que el 84 por ciento de las familias encuestadas son desplazadas y explicó que muchas de ellas se vieron obligados a huir varias veces debido a la inestabilidad persistente.
El 85 por ciento informó que no puede satisfacer sus necesidades diarias de alimentos, agregó.
Acnur precisó que más del 51 por ciento de esas familias tienen al menos un hijo sin un certificado de nacimiento y el 70 por ciento tiene a alguien del núcleo sin tarjetas de identidad.
“Estos documentos faltantes no son solo pedazos de papel, son clave para acceder a servicios vitales, educación y derechos. Sin ellos, las familias enfrentan barreras significativas para recibir asistencia y acceso a oportunidades”, apuntó.
El informe destacó que casi todas ellas tienen al menos un miembro vulnerable, incluidos mujeres y niños en riesgo, o personas con discapacidad.
La guerra comenzó en 2014, cuando los rebeldes hutíes se levantaron en armas y ocuparon grandes extensiones del país, incluida la capital, Sanaa.
Al año siguiente, una coalición árabe, dirigida por Arabia Saudita, intervino en el conflicto en apoyo del entonces presidente Abd Rabbu Mansour Hadi.