«Estados Unidos, al pisotear sus compromisos internacionales en materia de pluralismo de opiniones y hasta las cláusulas de su propia Constitución, ha declarado de hecho una guerra a la libertad de expresión en todo el mundo y recurre a las amenazas abiertas y el chantaje contra otras naciones en un intento de azuzarles contra los medios de comunicación rusos y establecer un control exclusivo sobre el espacio informativo global», declaró Zajárova.
La portavoz denunció «una caza de brujas, con la cultivación deliberada de una atmósfera de miedo generalizado y manía de espionaje que permite a los círculos gobernantes de EEUU manipular la opinión pública y proteger a la población de cualquier información que estimen inconveniente».
Zajárova reprochó a los organismos internacionales su mutismo ante las arbitrariedades que se cometen contra los medios de comunicación rusos y lo calificó como «consentimiento» y «complicidad».
«Las acciones de la Administración estadounidense no quedarán sin respuesta», advirtió.