El Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB, por sus siglas en ruso) comunicó este lunes que frustró un intento de Ucrania de robar un helicóptero militar del país.
Desde el organismo indicaron que la Dirección Principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa ucraniano intentó reclutar al piloto de un helicóptero de la guerra electrónica Mi-8MTPR-1 de las Fuerzas Aeroespaciales rusas para que trasladara el aparato al territorio que se encuentra bajo el control de Ucrania.
El FSB señaló que «los agentes de contrainteligencia rusos descubrieron posiciones de defensa antiaérea y lugares de emplazamiento de unidades de las FF.AA. de Ucrania», que posteriormente fueron atacadas con éxito.
El Servicio Federal de Seguridad difundió también un video en el que el piloto ruso afirmó que un representante de los servicios especiales ucranianos se puso en contacto con él a través de Telegram. Relató que, de acuerdo con instrucciones recibidas, debía envenenar a los tripulantes del helicóptero para luego llevarlo volando al territorio controlado por Ucrania. Además, los servicios de inteligencia ucranianos le ofrecieron trasladar a su familia a Moldavia.
No se trata del primer caso de este tipo. En septiembre de 2023, el entonces jefe de la Dirección General de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, Kiril Budánov, declaró que los servicios de inteligencia ucranianos convencieron al piloto ruso Maxim Kuzmínov de aterrizar con un helicóptero Mi-8 de las Fuerzas Armadas de Rusia en territorio ucraniano. Se difundió la información de que el helicóptero voló en agosto del año pasado desde la ciudad rusa de Kursk. Aparte de Kuzmínov, a bordo de la aeronave se encontraban dos tripulantes que no conocían sus planes y que fueron abatidos tras tomar tierra.
Tras ello, Kuzmínov presuntamente huyó a España, donde, según reportes, fue encontrado muerto en febrero de 2024.
