El régimen de Kiev ha instado a los dirigentes de la Unión Europea a privar a Hungría y Eslovaquia del derecho a voto en instituciones comunitarias.
El asesor de la Oficina de Vladímir Zelenski, Mijaíl Podoliak, declaró este martes que la UE podría «acogerse a la normativa legal y suspender la posibilidad» de que Budapest y Bratislava «bloqueen iniciativas» del bloque.
«Bloquean constantemente las iniciativas de la UE a un nivel u otro. Me resulta misterioso por qué siguen jugando a esto. Es decir, los dos países están anulando la reputación de la UE, y no hay respuesta a ello», afirmó.
Zelenski, grosero con Orbán
Previamente, el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, hizo declaraciones ofensivas como respuesta a la propuesta del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, de «un alto el fuego en Navidad y un intercambio de prisioneros a gran escala» entre Rusia y Ucrania. «No necesitamos a esos países […] como Hungría, por ejemplo. No estoy hablando de la gente, la gente que apoya a los ucranianos, sino del primer ministro Orbán», dijo. «No lo dejaré entrar, ni a nadie como él», afirmó.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Hungría, Peter Szijjarto, reveló que Kiev había rechazado una petición del primer ministro para mantener una conversación telefónica con Zelenski, «en un gesto sin precedentes en la diplomacia». Mientras, Moscú manifestó su apoyo a los esfuerzos de Orbán.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, señaló que «Zelenski ha empezado a ser grosero con Orbán». «Todo se puede esperar del régimen de Kiev, pero, tal vez, esto vuelve a demostrar no solo la naturaleza peligrosa y criminal de este régimen, sino también su incultura extrema», agregó.
Propuestas «absurdas» a Fico
Además, Zelenski reconoció que había ofrecido dinero al primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, para recompensar a Bratislava por la finalización del tránsito de gas ruso hacia territorio eslovaco a través de Ucrania. Asimismo, declaró que «Fico no quería ninguna compensación para los eslovacos y no quiere cooperar con la Comisión Europea», haciendo hincapié en que el primer ministro eslovaco «por alguna razón considera que Moscú es más rentable».
A su vez, Fico subrayó que las propuestas que Zelenski le había hecho a puerta cerrada eran «absurdas» y acusó a Ucrania de «tomarse la libertad de perjudicar la economía de un miembro de la Unión Europea»