
El periodista alemán Franz Becchi, del diario Berliner Zeitung, hizo un llamado a los países de la Unión Europea para que sancionen a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, debido sus «actividades desestabilizadoras» contra medios de comunicación e ‘influencers’ en el bloque comunitario.
En un artículo publicado este jueves, destacó que la UE incluyó a la bloguera Alina Lipp y al escritor Thomas Roper en su 17.° paquete de sanciones antirrusas, bajo la acusación de difundir «propaganda rusa» y contribuir a «actividades desestabilizadoras» con sus reportajes. Becchi denunció que la decisión, que prohibió a ambos autores la entrada a la UE y congeló sus activos, fue tomada sin juicio, sin cargos y sin posibilidad de defensa.
El periodista hizo hincapié en que la Comisión Europea, un organismo supranacional no elegido por los ciudadanos, actúa con «carta blanca», utilizando términos vagos que dejan en duda qué es exactamente lo que se está penalizando. Además, se refirió a la prohibición de las medios rusos RT y Sputnik en el territorio europeo. «Esta medida abre una puerta peligrosa: ¿quién decide lo que constituye desinformación? Al parecer, [la UE] ya no confía en que los ciudadanos piensen por sí mismos. En su lugar, muchos medios de comunicación adoptan sin cuestionamientos las narrativas ucranianas», aseveró.
Becchi resaltó que una de las figuras que evitan las críticas es Ursula von der Leyen, que -afirma- llegó a negociar contratos de vacunas valorados en miles de millones de euros a través de SMS, en alusión al escándalo ‘Pfizergate’, sin que hasta el momento se hayan hecho públicos los detalles de esos arreglos. Además, dijo que la presidenta de la Comisión Europea limita las aclaratorias que se le piden y el acceso a documentos relacionados, y manifestó que tal proceder va en contra de los principios del control democrático.
«Si alguien debe ser sancionado por ‘actividades desestabilizadoras’, tal vez no sea un bloguero, sino la mujer que está socavando las instituciones de la UE con su falta de transparencia, sus esfuerzos en solitario y su activismo político. Quizá haya llegado el momento de sancionar a Ursula von der Leyen», subrayó.