Así informó la Cancillería rusa tras una conversación telefónica entre Lavrov y el secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson.
Según el comunicado, el canciller ruso “llamó a adoptar medidas para impedir provocaciones contra las tropas gubernamentales sirias que realizan las operaciones contra los terroristas”.
Además, los ministros apuntaron a la necesidad de “incrementar la lucha contra los grupos terroristas y poner fin a intentos de usar sustancias químicas tóxicas” en Siria y acordaron seguir en contacto, en particular, sobre temas de la agenda internacional.
Se precisa que la conversación fue realizada por la iniciativa norteamericana.
El 18 de junio, la coalición internacional liderada por EEUU confirmó el derribo de un cazabombardero Su-22 de las Fuerzas Armadas de Siria al sur de la ciudad siria de Tabqa al precisar que había lanzado bombas cerca de las posiciones de las Fuerzas Democráticas Sirias.
Por su parte, el Ministerio de Defensa sirio anunció que la coalición derribó el avión “mientras realizaba una operación contra Daesh” (autodenominado Estado Islámico, proscrito en varios países, incluida Rusia).
El Ministerio de Defensa de Rusia calificó el ataque de la coalición como agresión bélica y suspendió el acuerdo suscrito con EEUU para evitar incidentes aéreos con la coalición.
Además Moscú exige a EEUU llevar a cabo una investigación minuciosa de las circunstancias del incidente durante el cual fue derribada la aeronave.
Dos días después del derribo del avión sirio, un caza estadounidense derribó un dron “pro-régimen sirio” Shaheed-129 de fabricación iraní cerca de la ciudad siria de Al Tanaf, luego de constatar que suponía una amenaza para las fuerzas de la coalición.
Washington lidera una coalición de 70 naciones que desde la segunda mitad de 2014 realiza ataques aéreos en Siria e Irak contra las posiciones de Daesh (Estado Islámico, organización terrorista proscrita en Rusia).
Sus operaciones en territorio sirio, sin embargo, no cuentan con la autorización de Damasco, que las califica de intervención, ni del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas.
