El nuevo misil supersónico ruso Zirkon, que ha sido ya probado, no deja ninguna oportunidad a un navío enemigo ni puede ser contrarrestado por los sistemas de defensa antiaérea o antimisiles existentes.
El canal de televisión ruso Zvezda citó al periódico norteamericano Washington Times, que declaró que el desarrollo del misil supersónico Zirkon representa un avance importante en términos de creación de un arma asimétrica que pueda servir como factor disuasorio frente a un ataque nuclear.
Durante los ensayos, que tuvieron lugar en abril de 2017, el misil Zirkon de 10 metros de longitud, alcanzó un récord de 8 veces la velocidad del sonido, lo que le convierte en absolutamente imbatible para los sistemas de defensa antimisiles existentes, según Zvezda.
“En este contexto, el sistema antimisil norteamericano se convierte en obsoleto”, declaró a este respecto el Washington Times.
Según los expertos, el vehículo equivalente supersónico estadounidense sin piloto X-51A Waverider, que está siendo probado en la actualidad en EEUU, ofrece unas prestaciones mucho menores que el Zirkon.
De hecho, el prototipo precedente, el X-43A, alcanzó, durante las pruebas realizadas en agosto de 2014 en Alaska, una velocidad máxima de 6.500 km/h y explotó en el aire después de siete minutos de vuelo.
Por el contrario, el misil ruso no ha experimentado ningún problema durante las pruebas que realizó en 2016.
“Esto es por lo que en un futuro próximo, el Zirkon se convertirá en el principal activo de la Marina rusa en toda confrontación con los grupos aeronavales de EEUU”, dijo el experto militar ruso Oleg Bojov en su artículo de Zvezda.
Él añadió que era posible lanzar el Zirkon desde los mismos lanzadores que utilizan el misil de crucero Kalibr y el misil anti-buque Oniks.
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