Miles protestaron el sábado para exigir que se acelere el proceso de investigación de corrupción del premier israelí, Benyamin Netanyahu.
Policías israelíes bloquearon el sábado por la noche una manifestación de más de 2000 personas que llegaron a la casa del procurador general del régimen israelí, Avichai Mandelblit, en Petaj Tikva, cerca de Tel Aviv, para protestar en contra del manejo de varios casos de corrupción de Netanyahu y su esposa, Sara.
Estas protestas se celebran cada sábado y ya se han producido por 39 semanas consecutivas. Las manifestaciones, que denuncian los retrasos de Mandelblit en las investigaciones de corrupción, se llevan a cabo desde el pasado mes de noviembre.
La corte suprema ha esperado hasta este domingo para autorizar las manifestaciones sin la necesidad de un permiso de la policía y sin límites del número de participantes.
Los agentes colocaron grandes obstáculos en toda la ciudad y arrestaron en agosto a los líderes de la protesta, Menny Naftali, un ex cuidador de la residencia del primer ministro, y Eldad Yaniv, un abogado anticorrupción y activista del Partido Laborista israelí, cuando trataban de llegar al lugar previsto de la manifestación.
Naftali alegó anteriormente haber sufrido abusos verbales y físicos por parte de Sara Netanyahu durante su empleo. En febrero se le concedió unos 43.735 dólares en daños después de que un tribunal aceptara sus reclamaciones.
Yaniv, reconocido en los últimos meses como un decidido activista contra Netanyahu, pide investigaciones criminales sobre las acusaciones de corrupción presentadas contra el primer ministro.
Netanyahu es considerado sospechoso de “soborno, fraude y trato de confianza” en particular por el caso 1000, que se refiere a un presunto favor del premier concedido al empresario y productor de Hollywood Arnon Milchan por regalos caros para él y su esposa, y el caso 2000 que gira en torno a los supuestos intentos del primer ministro de pactar una cobertura favorable a su persona con el editor del segundo periódico israelí más difundido, el Yediot Ahronot, a cambio de debilitar a su competidor, Israel Hayom.
Dadas las circunstancias, cerca de dos tercios de los israelíes demandan la suspensión temporal de Netanyahu por los supuestos casos de corrupción.
