Alemania ha relajado para el sector de los videojuegos su estricta norma que prohíbe la exhibición de esvásticas y otros símbolos nazis tras los debates públicos surgidos en torno a varias entregas del popular videojuego Wolfenstein.
Desde ahora, se permitirán símbolos nazis en los videojuegos si estos son usados de manera «socialmente apropiada» y se asegura que no promocionan el nazismo, ha anunciado el USK, el organismo regulador de la industria del país.
El USK precisó que escrutará los videojuegos de forma individual para determinar si cumplen las condiciones para poder disfrutar de esta exención.