La ONU evidencia en las decenas de miles de civiles muertos en Yemen potenciales “crímenes de guerra” cometidos por Arabia Saudí y sus aliados.
“La coalición de Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos puede haber efectuado ataques que violan el principio de distinción, proporcionalidad y precaución y pueden equivaler a crímenes de guerra”, reza un informe elaborado por un grupo de expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), publicado hoy martes.
El texto responsabiliza a Arabia Saudí de la mayoría de las bajas civiles, como consecuencia directa de los bombardeos “contra áreas residenciales, mercados, funerales, bodas, prisiones, barcos civiles e incluso centros médicos”.
Los expertos de la entidad internacional han acusado, además, a Arabia Saudí y sus aliados de flagrantes violaciones de los derechos humanos en Yemen, entre ellos el reclutamiento de niños de entre 8 y 17 años.
Los “tratos crueles y torturas, actos denigrantes, violaciones y el reclutamiento de niños menores de 15 años o haberlos utilizado como parte activa en las hostilidades” suponen también crímenes de guerra cometidos por Arabia Saudí en su agresión a Yemen.
Los expertos de la ONU han denunciado, de igual modo, el bloqueo aéreo, marítimo y terrestre impuesto por el régimen saudí a Yemen y han advertido de que tales restricciones han tenido un “efecto escalofriante” en el envío de la ayuda humanitaria al empobrecido país árabe, “donde 8,4 millones de personas están al borde de hambre”.
Desde marzo de 2015, un grupo de países liderados por Arabia Saudí lleva a cabo una campaña militar contra Yemen, utilizando varios tipos de armas, incluso las prohibidas a nivel internacional, con el objetivo de restaurar en el poder al expresidente fugitivo yemení, Abdu Rabu Mansur Hadi, un aliado de Riad, y hacer frente al movimiento popular yemení Ansarolá.
Los bombardeos saudíes han causado más de 11 000 yemeníes muertos, en su mayoría civiles, de acuerdo con los datos publicados por el Ministerio de Salud de Yemen.
