El Departamento de Justicia de EE.UU. acusó a una mujer rusa de intentar influir en las elecciones legislativas, previstas para el próximo 6 de noviembre.
“Los cargos de hoy alegan que la ciudadana rusa Yelena Alexeyevna Khusyainova conspiró con otros que eran parte de una campaña de influencia rusa para interferir con la democracia estadounidense”, dijo el viernes el ayudante del fiscal general de EE.UU., John Demers.
De acuerdo con el comunicado, Khusyainova dirigía un grupo, supuestamente apoyado desde Moscú, que llevó a cabo una campaña de desinformación masiva en línea durante las elecciones presidenciales del 2016.
La nota destaca que la detenida ha estado a cargo de las finanzas del grupo de desinformación que busca sembrar la división y confusión en las elecciones de EE.UU. al difundir información falsa sobre candidatos.
La Justicia norteamericana presenta estos cargos contra la ciudadana de 44 años, en la misma jornada que cuatro agencias estadounidenses de inteligencia y de aplicación de la ley han acusado a Rusia, Irán y China de influir en las legislativas de medio término en Estados Unidos.
“Estamos preocupados sobre las campañas en marcha de Rusia, China y otros actores extranjeros, incluyendo a Irán, para socavar la confianza en instituciones democráticas e influir en los sentimientos del público y políticas del Gobierno”, reza un comunicado de la Oficina del Director de la Inteligencia Nacional (ODNI), el Departamento de Justicia (DOJ), el Buró Federal de Inteligencia (FBI) y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) — en todos los casos por sus siglas en inglés—.
Las autoridades estadounidenses han acusado a Rusia y China de influir en las elecciones presidenciales y legislativas en varias ocasiones. El presidente estadounidense, Donald Trump, acusó en septiembre a Pekín de tratar de sabotear las legislativas venideras en represalia por las tarifas arancelarias de Washington a una serie de productos chinos.
El pasado julio, el director de la Inteligencia Nacional de Estados Unidos (DNI, por sus siglas en inglés), Dan Coats, defendió la conclusión de los servicios de inteligencia que apunta a la intervención de Rusia en las elecciones presidenciales que dieron la victoria al republicano Trump.
Por su parte, Moscú refuta dichas acusaciones y considera que se trata de un invento para deslegitimar al magnate republicano.
