EE.UU. ha lanzado un misil balístico intercontinental tras oficializar su abandono del Tratado INF, a lo que Rusia ha respondido haciendo lo propio.
“Un misil balístico intercontinental desarmado Minuteman III se lanzó durante una prueba de desarrollo el martes 5 de febrero, a las 23.01 hora estándar del Pacífico (7.01 del miércoles 6 de febrero GMT) desde la base de Vandenberg de la Fuerza Aérea, en California (suroeste)”, ha anunciado este miércoles el Departamento de Defensa estadounidense (el Pentágono) mediante una nota oficial.
La finalidad del lanzamiento era alcanzar un blanco situado en el océano Pacífico, en el atolón de Kwajalein (islas Marshall), señala el comunicado. Las autoridades del país norteamericano aun no han confirmado el resultado de la misión.
Por su parte, Rusia ha lanzado también hoy miércoles un misil balístico intercontinental de combustible sólido RS-24 Yars con una ojiva de reentrada múltiple y con la base sobre una plataforma móvil desde la base estatal de Plesetsk, en la región de Arcángel (en el norte del país).
La operación se ha realizado con el objetivo de confirmar las características tácticas, técnicas y de vuelo del sistema de misiles ruso, ha explicado el Ministro de defensa de Rusia, a la vez que confirmaba el éxito del lanzamiento.
Estas operaciones se realizan en medio de tensiones entre Rusia y EE.UU. en torno al control armamentístico, después de que la Administración del presidente de EE.UU., Donald Trump, formalizara el sábado su abandono del Tratado INF (siglas en inglés de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio), fundamental para la seguridad mundial durante la última etapa de la Guerra Fría, por un supuesto incumplimiento de Rusia que niega el Kremlin.
El homólogo de Trump, Vladímir Putin, respondió de inmediato al anuncio diciendo que Moscú “suspendía” igualmente su participación en el acuerdo y que no impulsaría nuevas negociaciones sobre desarme con los norteamericanos “hasta que hayan madurado”. El mandatario ruso resaltó además que, si EE.UU. construye misiles, Moscú lo hará también.
El Tratado INF, firmado en 1987, abarca los misiles lanzados desde tierra con un alcance de entre 500 y 5500 kilómetros. Cabe señalar que los misiles intercontinentales, como el Yars y el Minuteman III, son por definición de mayor alcance.
