EE.UU. denuncia la cooperación militar de Rusia con Venezuela y amenaza a Moscú con “respuestas ya preparadas”, en caso de que este siga con tal práctica.
“Hablamos sobre Venezuela. La posición de EE.UU. la ha dejado clara el presidente (Donald) Trump: deben irse. Sí, hablamos de eso”, dijo el viernes el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, en una rueda de prensa en Washington tras una reunión de los ministros de Exteriores de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Pompeo avisó a Moscú de las “respuestas ya preparadas” por Washington, incluida la imposición de las sanciones, con las que Elliott Abrams, el enviado especial de EE.UU. para Venezuela, amenazó a Rusia.
En este contexto, el titular estadounidense lamentó el mismo viernes en declaraciones al programa televisivo ‘Fox & Friends’ no haber visto señales de la partida del personal ruso del país caribeño y alertó de que la presencia de Moscú podría “agravarse antes de mejorar”.
Una fuente de la embajada rusa en Caracas, capital venezolana, informó a finales de marzo que dos aviones militares de Rusia aterrizaron en el aeropuerto Internacional Simón Bolívar en la ciudad de Maiquetía, norte del país, transportando a casi un centenar de militares, para cumplir contratos técnico militar.
Moscú ha asegurado que con la presencia de sus militares en suelo venezolano no busca interponerse en los asuntos internos del Estado soberano de Venezuela, recordando a Washington su propia presencia en muchos rincones del mundo.
En el mismo sentido, la Cancillería rusa recomendó a Trump que, “antes de sugerirle a alguien irse de Venezuela”, cumpla con su promesa de retirar las tropas estadounidenses de Siria.
Desde la autoproclamación del opositor Juan Guaidó como “presidente interino” de Venezuela y el inmediato reconocimiento de parte de Estados Unidos, el Gobierno de Vladimir Putin siempre ha salido en defensa del mandatario venezolano, Nicolás Maduro.
Al respecto, Rusia prometió el viernes incrementar su apoyo a Venezuela tanto en el plano político como en el económico, al mismo tiempo de volver a defender la presencia de sus especialistas técnicos en el país suramericano.
“Le guste o no a alguien, la presencia de ciudadanos rusos en el territorio de otro país, incluida Venezuela, es un factor de contención ante posibles actos insensatos como una intervención militar”, dijo el vicepresidente ruso, Yuri Borisov.
