El Grupo 4+1 manifiesta su firme apoyo al desarrollo del programa nuclear pacífico de Irán, en especial en el reactor de Arak y la planta nuclear de Fordo.
Este domingo, se celebró una reunión extraordinaria en Viena, capital de Austria, entre Irán y el G4+1 (los demás firmantes del acuerdo nuclear, es decir, el Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania), en un intento por salvar el convenio internacional, que se encuentra en peligro tras la salida de EE.UU. y el fiasco de Europa en compensar la violación estadounidense del pacto.
En la declaración final de la Comisión Conjunta sobre el Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), los representantes del G4+1 reafirmaron su fuerte apoyo al desarrollo del programa nuclear pacífico de Teherán.
La nota recalca, en particular, el desarrollo de los proyectos nucleares con fines pacíficos de la República Islámica en el reactor de Arak y la planta nuclear de Fordo, ambos situados en el centro del país persa.
Los participantes subrayaron además la necesidad de preservar el acuerdo internacional ante la violación de Washington. Recordaron en este sentido las partes esenciales del JCPOA: Irán aceptó limitar sus actividades nucleares a cambio del levantamiento de sanciones, que no obstante, fueron reimpuestas contra el país persa por EE.UU.
Tras el encuentro, que duró unas dos horas, el vicecanciller de Irán para Asuntos Políticos, Seyed Abas Araqchi, quien encabezaba la delegación iraní, calificó la cita de “constructiva”, pues los participantes se han comprometido a cumplir con sus obligaciones asumidas al firmar el PIAC.
Pero, Araqchi volvió a dejar claro que la República Islámica seguirá reduciendo sus compromisos nucleares hasta que los europeos garanticen los intereses de Irán, tras la salida unilateral de EE.UU. del acuerdo.
Un año tras la salida de Washington del JCPOA y ante la inacción de los europeos y la falta de medidas para compensar la violación estadounidense del acuerdo nuclear, Irán decidió en mayo pasado actuar de manera recíproca y, conforme a los artículos 26 y 36 del mismo pacto, reducir progresivamente algunos de sus compromisos para forzar a sus socios europeos a asumir sus obligaciones.