“El pueblo sirio es el único que decidirá sobre el futuro de su país”, ha asegurado Seyed Abás Musavi, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, al ser preguntado este domingo sobre unos informes publicados por varios medios occidentales, que indican que Irán, Rusia y Turquía, países garantes del proceso de paz en Siria, han coordinado el próximo Gobierno de Damasco.
“Irán, Rusia y Turquía, como garantes del proceso de Astaná, están tratando de fortalecer el diálogo sirio-sirio, crear zonas de desescalada, establecer el Comité Constitucional y seguir el proceso de reconciliación nacional en este país árabe”, ha sostenido el vocero persa.
Además, ha resaltado que la República Islámica de Irán siempre ha estado junto al pueblo y el Gobierno sirios en su lucha contra las bandas terroristas y ha aseverado que seguirá esta misma estrategia en el futuro.
En el 7.º encuentro ministerial del proceso de Astaná, celebrado el pasado 22 de abril, los ministros de Exteriores de Turquía, Rusia e Irán abordaron los últimos acontecimientos en la provincia siria de Idlib, así como el proceso político, la situación humanitaria y el retorno de los refugiados al país árabe.
El proceso de Astaná, llamado así por la capital kazaja en la que se celebró el primer encuentro en enero de 2017, es una iniciativa de Rusia, Irán y Turquía, con los dos primeros apoyando al Gobierno de Damasco y el tercero como respaldo de la oposición siria, para buscar una salida negociada al duradero conflicto en Siria.
Irán cree que los participantes en las cumbres de Astaná pueden tomar medidas efectivas para combatir el terrorismo, evitar daños a los civiles y resolver el conflicto mediante la diplomacia.
Teherán siempre ha enfatizado que la integridad territorial, la soberanía nacional y el derecho de los sirios a determinar su futuro son los principios a partir de los cuales resolver la crisis siria.
