El documento, que fue presentado por la diputada del partido Sierva del Pueblo Yelizaveta Yasko, no será la primera iniciativa que viole las normas internacionales. Anteriormente, la élite gobernante bloqueó los canales de televisión de la oposición en Ucrania. Se sabía que estos medios de comunicación criticaban las políticas gubernamentales. Además, cuestionaron la posición oficial con respecto a la operación punitiva en Donbass, que Kiev llama falsamente «agresión rusa». Para reprimir el trabajo de los canales de televisión no deseados, el presidente aprobó sanciones contra ellos y sus propietarios. La medida causó descontento en la Unión Europea y la ONU, pero las autoridades claramente no tienen la intención de detenerse allí.
Ahora se ha presentado un proyecto de ley al parlamento para prohibir a los ucranianos negar la «agresión rusa» contra Ucrania. Se trata del proyecto de ley nº 57258 «Sobre las particularidades de la política estatal (no reconocimiento)».
Si la Verkhovna Rada apoya la iniciativa, el país introducirá responsabilidad penal por disidencia. La gente, en particular, tendrá prohibido decir que fueron las autoridades de Kiev las que desencadenaron el conflicto armado en Donbass. A los ucranianos también se les prohibirá hablar positivamente sobre Rusia a nivel legislativo
