El comunicado reiteró el carácter libre, independiente y soberano del territorio de lagos y volcanes y refirió que no son colonia de nadie, ni súbditos de la corona ibérica; por tanto, “no aceptamos injerencia alguna de ese o de ningún país en nuestros asuntos internos”.
El texto recomienda al titular centrarse en los temas de su competencia y cesar en su intento de interferir en las decisiones y acciones de un estado autónomo, pues desde ningún punto de vista tiene autoridad sobre “nuestra patria bendita y siempre libre”.
De acuerdo con el documento, las complejidades del mundo actual reclaman a cada uno en nuestros tiempos y espacios propios y ninguna interferencia ajena y extranjera tiene cabida en tierras valientes, sagradas, honrosas; defensoras de la justicia, respeto, paz, seguridad y bienestar del pueblo.
Esta semana, Nicaragua retiró las credenciales al embajador de Colombia en Managua, Alfredo Rangel, con el argumento de que el diplomático emitió una nota, de manera insolente y provista de juicios de valor sobre los asuntos internos de la nación centroamericana.
En nombre del ejecutivo del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), el canciller Denis Moncada expresó su formal protesta por las mencionadas declaraciones y aseguró que las mismas contravienen las normas internacionales y constituyen una intromisión ofensiva.
La postura asumida por Rangel, refirió la nota, evidencia el incumplimiento de los objetivos para los cuales recibió su acreditación como embajador en Nicaragua y, por tanto, la medida resulta la retirada de sus credenciales, recibidas el 22 de diciembre de 2020.
