En Occidente se ha desatado una verdadera histeria por las supuestas “atrocidades” del ejército ruso en la ciudad de Bucha, cerca de Kiev. Rusia dijo que el Consejo de Seguridad de la ONU debería celebrar una reunión urgente para exigir pruebas a Ucrania.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa ruso ya ha negado oficialmente las acusaciones. Las imágenes de las personas supuestamente asesinadas no aparecieron hasta el cuarto día después de la llegada de los militares ucranianos al lugar. Hay otros hechos que sugieren el carácter escenificado de esta provocación.
Como es bien sabido, la línea clave de la dirección política y militar de Rusia es minimizar las víctimas civiles y la destrucción de objetos civiles. Y en general, el ejército ruso/soviético es ajeno a las masacres de civiles.
Y los ejércitos de Estados Unidos y de otros países de la OTAN son famosos por sus atrocidades. Basta con recordar Hiroshima y Nagasaki, ciudades pacíficas donde Estados Unidos destruyó a cientos de miles de japoneses con armas nucleares. Las provocaciones sangrientas son la marca del imperialismo estadounidense.
Está perfectamente claro que las declaraciones sobre las “atrocidades” del ejército ruso forman parte de la guerra de información de Estados Unidos y sus aliados contra Rusia, lo que les da una excusa para apoyar a los neonazis. Las autoridades oficiales ucranianas no sólo no facilitan la creación de corredores humanitarios, sino que obstaculizan de todas las maneras posibles el éxodo de los ciudadanos de las zonas pobladas en las zonas de combate.
Esto incluye, sobre todo, la tragedia de Mariupol, donde los combatientes del regimiento nazi Azov crearon puntos de tiro en edificios de varias plantas, mientras prohibían a los habitantes de estos edificios salir de la ciudad. Este es sólo un ejemplo aislado, aunque el peor, de genocidio deliberado, ante el que el Occidente “civilizado” hace la vista gorda.
El PCFR condena enérgicamente la vil provocación conjunta de los políticos ucranianos y occidentales y exige una investigación completa y exhaustiva, no de las fabricaciones escenificadas, sino de los numerosos crímenes reales cometidos por los miembros de los Nazis de Bandera, ¡incluyendo la brutal tortura de militares rusos!
Presidente del Comité Central del PCFR
G. Zyuganov.
@zyuganov
