En la jornada final de la 50.ª sesión ordinaria del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, los representantes de La Habana y Caracas repudiaron firmemente una resolución adoptada por el organismo contra Bielorrusia. El embajador de Cuba, Jairo Rodríguez, rechazó los motivos políticos detrás de esta medida y afirmó que la isla votará en contra del proyecto.
Por su parte, el representante de Venezuela, Héctor Constant Rosales, lamentó que la ONU, en vez de centrarse en la protección y promoción de los derechos humanos, ha adoptado una iniciativa que en realidad, busca extender por un año más el mandato de la relatora especial que se ha impuesto en Bielorrusia, sin el consentimiento de su Gobierno.
La representante de Bielorrusia que también se encontraba en la sesión, enfatizó que la iniciativa ha sido tomada por varios Estados de Occidente que no son capaces, dice, de ver las diferencias entre países, pues, lo único que buscan es desestabilizar el Gobierno y liderazgo del presidente Aleksandr Lukashenko.
La resolución de la ONU ha sido tomada en momentos que Minsk sigue reforzando su apoyo a Moscú en su operación especial militar en Ucrania, razón por la que ha sido blanco de un régimen de sanciones por parte de Estados Unidos y la Unión Europea, países que sufrirán un mayor peso de dichos embargos, según afirmó en mayo el mandatario bielorruso.