“El rol de un referndo internacional es para garantizar que el proceso sea legítimo y hoy lo que pudimos ver a lo largo de estos días es justamente eso, totalmente diferente a lo que nos muestran los medios en nuestra región, pudimos ver que la gente viene a votar libremente, viene con una cara de esperanza”, declaró a la corresponsal de Sputnik en la ciudad.
El politólogo de origen vasco radicado en México Katu Arkonada participó también en el referendo como observador internacional y descartó ante Sputnik incidencias durante el proceso.
“Ha transcurrido muy organizadamente y con la gente en las calles votando con mucha energía y con mucho deseo de formar parte de Rusia porque, finalmente, esto es culturalmente, políticamente, lingüísticamente esto es Rusia y no Ucrania”, declaró.
“Cuando uno llega desde Rusia no se encuentra con otro país (en el Donbás), sino se encuentra al final con un mismo país y frente a la manipulación mediática que se da muchas veces, lo que uno se encuentra es una gente muy informada, con mucho rechazo hacia las políticas del gobierno ucraniano”, apuntó Arkonada.
El politólogo se dijo sorprendido del nivel de intensidad con que la comunidad de Lugansk expresa su deseo de adherirse a Rusia, un relato distinto al que relatan medios occidentales inclusive en América Latina, donde la información llega ya tamizada por filtros.
A su vez, el inspectador jefe de la lengua rusa del Ministerio de Eduacación de Siria, Bassam Tawil, quien también participa como observador, relató que todo el proceso es voluntario, descartó rumores sobre el uso de armas para presionar a los votantes y, al contratio, subrayó el ambiente festivo del referendo.
El otro representante de Siria, Mohammed Zorik, subrayó que “Ni Rusia controla el proceso ni hay militares involucrados” en el referendo que celebran autoridades de la República Popular de Lugansk, para decidir sobre su adhesión a Rusia.
Normalmente occidente se llena la boca hablando de democracia, pero en el momento en el que alguien decide darle la voz al pueblo que en realidad tendría que ser soberano y decidir su futuro, entonces ya empieza a decir que esto no da garantias, que hay que cumkplir la legislación internacional etc., la cuestión es que no sea el pueblo quien decida si no ellos (occidente) y así de esta manera tienen la excusa para no reconocer estos referendums que se han realizado de manera democratica y sin interferencias de nadie. Ahora bien cuando a ellos les intereso que en Kosovo se hiciera un referendum, entonces si que dijeron que era democratico y con todas las garantias; el cinismo de occidente no tiene precio.