La defensa aérea rusa ha derribado este 26 de diciembre un dron ucraniano que volaba a baja altura cerca de un aeródromo militar en la región de Sarátov. El Ministerio de Defensa de Rusia informó que tres militares fallecieron a causa de la caída de los restos del vehículo no tripulado.
El organismo precisó que el equipo técnico de aviación que alberga el aeródromo de Engels no resultó dañado.
El gobernador de la región, Román Busarguin, comunicó que ningún objeto de infraestructura civil resultó afectado por el ataque ucraniano. «No hubo emergencias en las zonas residenciales de la ciudad», indicó a través de su canal de Telegram. «No hay absolutamente ninguna amenaza para la población», aseveró.
Según sus palabras, los agentes del orden están verificando los datos sobre el incidente.
Busarguin reiteró que todos los sistemas de alerta en la región funcionan correctamente y calificó a los militares rusos de «verdaderos profesionales que conocen su trabajo», señalando que actualmente se presta «atención especial» a la cuestión de seguridad.
