Dos unidades de las tropas de Kiev perdieron decenas de sus mejores vehículos de combate y tanques de fabricación occidental, así como una cantidad significativa de efectivos en un reciente intento de romper las defensas rusas. Así, según un análisis de Forbes publicado este martes, la “ampliamente anticipada” contraofensiva ucraniana resultó ser un “desastre”.
De acuerdo con los datos del medio, la 47.ª Brigada de Asalto y la 33.ª Brigada Mecanizada del Ejército ucraniano intentaron cruzar un campo de minas el 8 de junio en la provincia rusa de Zaporozhie, pero no consiguieron más que numerosas bajas.
Se explica que en aquel momento la inteligencia rusa detectó el grupo de combate de las brigadas acercándose a una localidad y llamaron a helicópteros de ataque Kámov, que, por su parte, lo atacaron con misiles antitanque, al mismo tiempo que las minas destruían los vehículos ucranianos. Aunque los vehículos de desminado Leopard 2R entregados por parte de Finlandia, con ayuda del desminador Wisent de fabricación alemana, intentaron despejar el camino e incluso arrancaron algunas minas, finalmente pasaron por alto más de unas cuantas.
Como consecuencia, tres Leopard 2R y un Wisent activaron algunas minas, que explotaron, al igual que cuatro tanques Leopard 2A6 y 17 vehículos blindados Bradley M-2 de fabricación estadounidense.
Forbes indica que aunque la pérdida de un Wisent no supone un gran problema para Kiev, ya que dispone de decenas de ellos, la situación es más complicada con los Leopard, ya que los ucranianos han recibido un número limitado de ellos. “En una o dos horas el grupo de combate de las brigadas 47 y 33 perdió casi una quinta parte de los M-2 de Ucrania, una quinta parte de sus Leopard 2A6 y la mitad de sus Leopard 2R”, señaló.
Al mismo tiempo, los analistas sugirieron que algunos de los vehículos abandonados allí podrían ser evacuados. Sin embargo, según las imágenes captadas en la zona, la magnitud de los daños es enorme: por ejemplo, uno de los Leopard 2A6 abandonados está quemado y oxidado, mientras que al menos uno de los Bradley M-2 perdió su torreta.
Además, muchas de las minas se encuentran allí, por lo que para realizar la evacuación, las tropas de Kiev tendrían que asegurar la zona, desplegar defensa aérea y retirar las minas. Pero incluso si los ucranianos lo consiguieran, la reconstrucción de estos vehículos llevaría semanas, si no meses, de trabajo.
