Para el mandatario europeo, los roces entre Varsovia y Kiev son una prueba de que Polonia está sometida a las potencias occidentales y de que a su vez estas han abandonado al presidente ucraniano, Volodímir Zelenski. La información fue difundida por el portal bielorruso Belta.
«¿Cree que Polonia está presionando a la pobre Ucrania sin motivo? No. Se ha dado una orden desde el extranjero: ‘Es hora de deshacerse de Zelenski, ya estamos hartos de él’. Pronto habrá elecciones en Estados Unidos. A nadie le importará eso. Y tenemos que defendernos porque no sabemos qué esperar de estos locos políticos polacos», dijo Lukashenko.
Recientemente, Ucrania presentó una demanda contra Polonia, Hungría y Eslovaquia ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) para que se levante el embargo a las importaciones de grano del país.
El sector es uno de los más importantes para la economía ucraniana, que veía cómo sus exportaciones entraban en Europa en grandes volúmenes y libres de aranceles, lo que perjudicaba a los agricultores de las otras tres naciones.
Como consecuencia de las crecientes tensiones entre polacos y ucranianos, Varsovia decidió dejar de suministrar armas a Kiev. Hasta entonces, Polonia figuraba entre los tres principales proveedores de armas a Ucrania, sólo por detrás de Estados Unidos y el Reino Unido.