«Para las 22.00 horas (GMT+4), de Nagorno Karabaj a Armenia llegaron 78.354 personas«, escribió la funcionaria armenia en su página en redes sociales.
El pasado 22 de septiembre, el asistente del presidente azerbaiyano, Hikmet Hajiyev, reveló que la integración de los armenios de Nagorno Karabaj en la vida económica, política y social de Azerbaiyán se llevará a cabo con dificultades, y hay que estar preparados para que algunos decidan irse.
Al mismo tiempo, el presidente de ese país, Ilham Aliyev, ha declarado repetidamente que los armenios de Nagorno Karabaj tendrán los mismos derechos que los ciudadanos de Azerbaiyán.
Previamente a la escalada de tensiones más reciente, Ereván estimaba en torno a 120.000 personas la población de Nagorno Karabaj.
El 19 de septiembre, Azerbaiyán anunció el inicio de una «operación antiterrorista» en Nagorno Karabaj para lograr «la retirada de las tropas armenias» de ese territorio. A su vez, Ereván negó la presencia de sus tropas en la región y tachó la operación de «agresión» contra el pueblo de Nagorno Karabaj.
Al día siguiente, el Ministerio de Defensa azerí anunció que se había llegado a un acuerdo sobre una tregua en Nagorno Karabaj, cuyas condiciones incluyen, en particular, el desarme y la disolución de las formaciones ilegales armenias en la región.
El 21 de septiembre, representantes de Bakú y de la comunidad armenia de Nagorno Karabaj celebraron una primera ronda de negociaciones que se centró en temas de reintegración.
Este 28 de septiembre, el presidente de la república rebelde, Samvel Shajramanián, decretó «disolver antes del 1 de enero de 2024 todas las instituciones públicas y organizaciones supeditadas a ellas» y anunció que la República de Nagorno Karabaj dejaría de existir.