En el documento, los firmantes expresaron su apoyo al pueblo palestino, en pie de lucha desde hace más de 75 años por la liberación de sus territorios, refirieron.
Asimismo, calificaron como crímenes de guerra y de lesa humanidad los bombardeos a esa zona costera que el gobierno de Tel Aviv está llevando a cabo desde el pasado 7 de octubre ocasionando la muerte de más de tres mil 500 personas y más de 13 mil 300 heridos, principalmente mujeres y niños.
En este momento, en Palestina se está llevando a cabo uno de los más sangrientos episodios de un genocidio que se inició con la Nakba, en 1948, cuando fueron expulsados de sus tierras por parte del Estado de Israel, plasmaron los denunciantes en el texto.
De igual manera, las organizaciones ecuatorianas rechazaron el apoyo del gobierno de los Estados Unidos (EEUU) a los sistemáticos ataques contra Gaza.
Todo esto se lleva a cabo con armas de guerra prohibidas por el derecho internacional, tales como las bombas de fósforo blanco. Las bombas lanzadas esta semana sobre territorios palestinos equivalen a un cuarto de la bomba atómica de Hiroshima y Nagasaki, y caen sobre una población civil a la cual no se permite salir de los territorios bombardeados, advirtieron.
En el manifiesto, exigieron también al Estado ecuatoriano, en su condición de miembro del Consejo de Seguridad y del Comité de las Naciones Unidas para el Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino, suspender inmediatamente sus relaciones diplomáticas con Israel y se una a las múltiples voces que se alzan en este momento para exigir un cese al fuego total en los territorios palestinos y la creación de un corredor de ayuda humanitaria.
Este jueves, cientos de personas marcharon en esta capital para demandar el cese de los ataques israelíes contra civiles palestinos en Gaza.
El exembajador de Ecuador ante Naciones Unidas Horacio Sevilla, uno de los participantes en la protesta, comentó a Prensa Latina la necesidad de ese tipo de acciones solidarias para de una vez frenar las agresiones, encontrar paz y que se establezca el Estado de Palestina.
La marcha fue convocada por colectivos de la sociedad civil ecuatoriana para condenar lo que califican como el «silencio cómplice» de la comunidad internacional que no ha frenado el genocidio perpetrado por el régimen sionista.
Una bandera de Estados Unidos fue quemada en la protesta como rechazo al apoyo de Washington al gobierno de Tel Aviv y sus acciones bélicas.
