Diario Alemán “Junge Welt”.— El viernes, la CIJ en La Haya se pronunció sobre la solicitud urgente de Sudáfrica, en la que Pretoria pedía el fin inmediato de la violencia mediante medidas cautelares.
Según el fallo, Israel está obligado «con efecto inmediato» a garantizar que sus fuerzas armadas no cometan ningún acto que viole la Convención de la ONU sobre Genocidio. Sin embargo, considerando la persistente actitud del estado sionista no se espera que el fallo de la CIJ produzca cambios profundos en la conducción de la guerra por parte de los israelitas.
Mientras tanto, más de 26.000 personas han muerto y más de 64.000 han resultado heridas en Gaza desde que comenzó la guerra el 7 de octubre. Más del 85 por ciento de la población fue desplazada.
Además de la exigencia a Hamás de la «liberación inmediata e incondicional» de los rehenes, el tribunal exige a Israel a tomar medidas para mejorar la situación humanitaria de los palestinos en el enclave.
«Palestina acoge con satisfacción el fallo» de la CIJ, afirmó un diplomático comunicado del ministro palestino de Asuntos Exteriores, Riad Maliki. La decisión es «un importante recordatorio de que ningún Estado está por encima de la ley y estaremos siempre agradecidos por el valiente paso de solidaridad activa dado por Sudáfrica», aseguró Maliki.
En su decisión, la CIJ rechazó la interpretación hecha por Benjamín Netanyahu. El primer ministro israelí ha afirmado que acusación que Israel está cometiendo genocidio es «no sólo falsa, sino escandalosa», por tanto el ejército israelí continuará la guerra hasta la «victoria absoluta».
Lo único cierto es que en Gaza el estado israelita continúa intensificando el ataque contra la ciudad de Khan Yunis, en la parte sur de la Franja. El jueves por la tarde, el Ministerio de Salud informó de la muerte de 20 civiles mientras esperaban ayuda humanitaria en un cruce. Un testigo dijo a la AFP que la gente quería conseguir comida y harina «porque no tienen nada que comer». Entonces aparecieron de repente los tanques y “abrieron fuego contra la gente”.
Alrededor de 130 países han expresado públicamente su apoyo a la demanda de Sudáfrica, 19 de los cuales han hecho suya la acusación de genocidio, entre ellos Namibia, Cuba, Turquía, Brasil y Colombia.
En un informe continuamente actualizado del politólogo Alonso Gurmendi Dunkelberg del King’s College de Londres, se nos recuerda que sólo ocho Estados se han posicionado del lado de Israel, entre ellos Estados Unidos, Gran Bretaña, Hungría y Austria. Alemania es el único país que ha dado un paso más allá y apoyará activamente a Israel.
El 12 de enero, el gobierno federal alemán anunció su intención de “intervenir como tercero en la audiencia principal”. Además la declaración oficial afirma que «rechaza resuelta y expresamente» la acusación de genocidio porque «no tiene fundamento alguno».
El título original de la declaración decía “Corte Penal Internacional”, un tribunal donde se ven casos contra individuos, no contra los Estados, como es el mandato dado por la ONU a la Corte Internacional de Justicia. Increíblemente, el gobierno federal se equivocó de tribunal. Este es el nivel de quienes gobiernan Alemania en la actualidad.
