El régimen de Israel bombardea una escuela de la ONU que alberga a los palestinos desplazados en el sur de la Franja de Gaza y destruye el edificio del centro.
En los vídeo compartidos en las redes sociales se ven columnas de humo elevándose del edificio mientras la gente corre al lugar en busca de sus hijos.
“Le pido al mundo entero, a todas las naciones, que nos tengan compasión, que nos miren y nos apoyen. Tienen que presionar a todo el mundo para que detenga esta guerra y esta hostilidad. Lo que nos está sucediendo es injusto, no podemos soportarlo, no podemos”, ha denunciado un residente no identificado.
Muchos palestinos buscaban refugio el miércoles después de huir de sus hogares en el sur de Gaza mientras Israel continuaba con su ofensiva militar en el territorio densamente poblado.
Según testigos presenciales, las fuerzas israelíes llevaron a cabo nuevos ataques en la ciudad sureña de Rafah en medio de los feroces combates con los combatientes palestinos durante la noche.
Los funcionarios sanitarios han afirmado que al menos 12 personas murieron en nuevos ataques en el centro y norte de Gaza.
La coordinadora especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para Gaza, Sigrid Kaag, declaró el martes ante el Consejo de Seguridad del organismo que más de un millón de personas están “buscando desesperadamente refugio y seguridad” en Gaza.
Expresó también su preocupación por los informes sobre las nuevas órdenes de evacuación de Israel en Jan Yunis (sur de Gaza) y su impacto en la población civil.
Cientos de personas huyeron de Jan Yunis después de que el ejército del régimen bombardeara nuevamente la ciudad prácticamente en ruinas y ordenara una evacuación masiva de sus residentes el lunes. Según la ONU, 250 000 palestinos en el sur de Gaza se han visto afectados por esas órdenes.
La semana pasada, el ejército israelí ordenó la evacuación del distrito de Al-Shuyaiya, en el norte de Gaza, y poco después se produjeron intensos combates.
HispanTV / CubaSí
Tienen que detener esos ataques, se han convertido en lo qué más odian