En lo que llevamos de 2024, el ejecutivo PSOE-Sumar ha aprobado 10.043,2 millones de euros “extra” para gasto militar, fuera de los presupuestos prorrogados del 2023. Además, han comprometido otros 22.319 millones de euros en nuevos programas de armas (fragatas, submarinos, aviones Eurofighter y F35, vehículos Pizarro y otros sistemas de armas ). La escalada belicista y la política gubernamental se encuentran en sintonía con los mandatos de la OTAN y la Unión Europea. Oficialmente reconocen estar destinando el 1,2 % del PIB en la escalada belicista, pero realmente estamos cercanos al 4 % del PIB, utilizando los criterios establecidos por la propia OTAN; y Pedro Sánchez ha prometido continuar la escalada hasta el 2 % del PIB para 2029. El occidente colectivo se prepara para la guerra, al tiempo que las 5 principales empresas de armas (las corporaciones estadounidenses Lockheed Martin Corp., RT- antes Raytheon Technologies-, Northrop Grumman Corp., Boeing y General Dynamics Corp) hacen caja.
Nosotros y nosotras nos movilizamos contra la guerra imperialista y por la paz. Lanzada la campaña “Que no nos arrastren a la guerra”, durante el mes de junio vimos algunas acciones de calle en varios puntos. Arrancó el 15 de junio con la recuperada marcha a Torrejón, se desplegaron pancartas en puentes y calles de Murcia y Alacant y cerramos el mes desplegando pancarta en la concurrida rotonda de Alcampo en La Laguna, Tenerife.
Seguirán en más lugares y fechas otras acciones de denuncia de la guerra, sumando fuerzas a la campaña y paralelamente, confrontando con los discursos belicistas dominantes, jaleados desde los medios de propaganda sistémicos que producen y distribuyen supuesta información que acaba imponiendo y configurando una visión del mundo cuya finalidad no es otra que arrastrar a los pueblos a la barbarie y la guerra.
Ni paz entre clases ni guerra entre pueblos.
Redacción UyL
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