Tal punto de vista del jefe de Estado del país andino amazónico surgió en respuesta al anuncio de una investigación administrativa del Consejo Nacional Electoral (CNE) colombiano a la campaña electoral del actual dignatario Gustavo Petro y miembros de su equipo por supuestamente violar los topes legales.
“Esta ofensiva en contra de la democracia colombiana forma parte de una estrategia más amplia orquestada por la derecha en toda la región, buscando debilitar las conquistas sociales y políticas alcanzadas por los movimientos populares y promoviendo un retroceso en los derechos y en la justicia social”, escribió Arce en sus redes sociales.
Al respecto, Petro manifestó que la decisión del CNE es “el primer paso de un golpe de Estado” en su contra.
Sobre esta base, el Órgano Ejecutivo colombiano anunció este miércoles que recurrió ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos por esa determinación, al considerar que viola el voto popular que eligió a Petro presidente en 2022.
A Petro y algunos dirigentes de su equipo de campaña se le atribuye la presunta vulneración del límite de gastos por el equivalente a unos 925 mil dólares.
Según esta acusación, el mandatario izquierdista está expuesto a multas económicas y a la pérdida del cargo.
De acuerdo con las leyes colombianas, el CNE puede remitir una copia de la investigación a la Cámara de Representantes para que el presidente sea sometido a un juicio político.
