La situación a la que se enfrenta el régimen ucraniano ha empeorado desde el pasado mes de febrero cuando era un momento mejor para alcanzar un acuerdo de paz con Rusia, declaró este miércoles el presidente estadounidense, Donald Trump.
Comentando ante periodistas las conversaciones que tuvieron lugar en Moscú entre el enviado especial de la Casa Blanca, Steven Witkoff, y el presidente ruso, Vladímir Putin, sobre la paz en Ucrania, el mandatario del país norteamericano recordó su reunión con el líder del régimen de Kiev, Vladímir Zelenski, en febrero pasado.
«Cuando yo estaba en esta oficina y hablé sobre que no tenía cartas, le dije que no tenía cartas. Ese era el momento de llegar a un acuerdo. Pensé que habría sido un momento mucho mejor para llegar a un arreglo. Pero, en su sabiduría, decidieron no hacerlo. Ahora tienen muchas cosas en su contra», afirmó Trump.
El inquilino de la Casa Blanca evaluó como «muy buena» la reunión del martes en el Kremlin. «Qué saldrá de esa reunión no puedo decirle, porque para bailar tango hace falta dos, ya saben, Ucrania», añadió.
- El enviado especial de la Casa Blanca, Steven Witkoff, acompañado por el yerno de Trump, Jared Kushner, se reunió este martes en el Kremlin con Putin en el marco de los esfuerzos por concertar el plan de paz para el conflicto ucraniano, promovido por Washington. La reunión duró cinco horas.
- El mandatario ruso recibió a Witkoff en medio de los avances de las Fuerzas Armadas de Rusia en el marco de la operación militar especial. Durante su visita a un puesto de mando, Putin declaró el pasado domingo que la iniciativa en toda la línea de contacto en el frente está completamente en manos de las tropas rusas, que «están aumentando la presión».
- Witkoff está considerado como el principal artífice de la propuesta inicial de 28 puntos, que fue parcialmente modificada durante las consultas celebradas con la parte ucraniana el pasado 23 de noviembre en la ciudad suiza de Ginebra y que prosiguieron este domingo en Florida. El texto original del plan, criticado fuertemente por varios países europeos, ignoraba algunas de las principales exigencias de Kiev, incluida su negativa a ceder el Donbass y su aspiración a unirse a la OTAN. Además, incluyó algunas oportunidades comerciales para que Rusia haga negocios con EE.UU.
