Suleiman al-Abás, el ministro de esta Cartera, ha dicho que los pozos de Sadad 8 y Abu Rabah (situados en el sur de la provincia de Homs) están listos para ser utilizados.
Sadad 8 y Abu Rabah, respectivamente, tienen una capacidad de producción de 300 y 350 mil metros cuadrados de gas.
De acuerdo con las fuentes sirias, la recuperación de dichos pozos aliviaría la escasez de energía provocada por los terroristas y los llamados ‘rebeldes’ desde el inicio de la crisis en 2011.
Los grupos terroristas EIIL (Daesh, en árabe) y Frente Al-Nusra (también llamado Frente Fath Al-Sham), apoyados por el Occidente y algunos Estados árabes ribereños del Golfo Pérsico, tomaron muchos pozos de petróleo y gas del
Mientras tanto, una gran parte de los pozos petrolíferos y gasíferos del país han sido liberados por las fuerzas sirias que gozan del respaldo de los combatientes del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), los asesores militares iraníes y la aviación rusa.
Cabe recordar que una gran parte de las instalaciones petrolíferas y gasíferas sirias ha sido destruida por los bombardeos de la llamada ‘coalición contra EIIL’, liderada por Estados Unidos. Una agresión condenada duramente por Damasco.
La infraestructura económica del país también se ha convertido en el blanco de los ataques aéreos de la ‘coalición’ llevada a cabo sin un mandato del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU).
En este sentido, el Gobierno sirio ha pedido indemnizaciones en reiteradas ocasiones a la llamada coalición por sus bombardeos contra las infraestructuras del país.
