*La Riscossa (lariscossa.com)
Desde hace unos meses, la situación en Donbass parece haber empeorado: aunque prácticamente ha desaparecido de los principales medios de comunicación, el conflicto se ha mantenido sin parar desde 2014. Hablamos de ello con David Cacchione de la Banda Bassotti; grupo musical que desde hace años lleva a cabo la Caravana Antifascista, una iniciativa concreta de solidaridad internacionalista en apoyo al pueblo de Donbass.
¿Ha denunciado recientemente en su página el riesgo de que el conflicto se recrudezca más que en los últimos años, como está ocurriendo en estos momentos?
Los acuerdos de Minsk nunca han sido respetados por el Gobierno de Kiev. La llamada zona gris, que se suponía que era un amortiguador, fue ocupada por los maidanistas. Sus francotiradores matan a civiles: hace una semana la última víctima fue un anciano baleado por un tirador de Kiev. Recibió un disparo en la cabeza mientras trabajaba en su campamento.
Hace unos 10 días, el Gobierno de Kiev intensificó sus bombardeos y llevó más tropas a la frontera. En febrero hubo unas 27 bajas entre los soldados del Donbass. A diferencia del enemigo, las tropas de Donbass tienen la obligación de no responder al fuego. Sólo en una ocasión respondieron al fuego atacando los cañones de las posiciones de artillería de Kiev.
¿Cuál es el papel del pueblo en la batalla de Donbass? ¿Cuáles son las posiciones de los trabajadores, agricultores y mineros sobre el conflicto?
La mayoría de la población es rusa. Casi todos son hijos y nietos de quienes lucharon contra el nazismo. Cuando estalló el golpe, era imposible que permanecieran bajo el régimen fascista.
¿Por qué se puede llamar antiimperialista a la lucha de Donbass?
El imperialismo crea revoluciones de colores, primavera árabe y –ante contradicciones reales– organiza oposiciones fascistas. La OTAN, entonces, bajo las órdenes de Washington, se ha puesto en contra de Rusia durante mucho tiempo. El imperialismo está interesado en sus materias primas y en hacerlas sentir el aliento en el cuello.
En los últimos años El Pensamiento Único también se ha extendido en mentes “progresistas”. Por favor, dejemos de seguir el ejemplo del PD. Quizás algunos militantes hayan permanecido vinculados al Partido Comunista –digo quizás–, pero su liderazgo es, en nuestra opinión, el de otro partido de centro-derecha. No hay más que ver las políticas que aplica y las alianzas que hace. En política exterior, son pro-Estados Unidos. Estaban en Maidán arenando a la multitud. Multitud donde los nazis lo tomaron como amos. Hay fotos y videos para presenciar todo esto, por no hablar de los apretones de manos y acuerdos con nazis reconocidos. Ni siquiera hacen nada para ocultarlo, no solo en Donbass. En Siria apoyaron a los Cascos Blancos: otra farsa más para los bien pensadores. Aparte de ellos, incluso el Manifiesto, nunca ha hecho grandes páginas sobre la masacre de la Casa de la Unión de Odessa o las poblaciones que son atacadas todos los días en Donbass, nunca han enviado reporteros para hacer servicios en los batallones nazis en Kiev. En cambio, hizo hincapié en los negocios de cascos blancos en Siria y Femen. Cuando algunos de estos fueron fotografiados haciendo cócteles molotov durante la masacre de Odessa, el Manifiesto no escribió nada sobre el Femen.
¿Puede hablar de la caravana antifascista y cómo podemos apoyar su causa?
El proyecto es ahora estacionario. Con el covid, salir es imposible. Desde que comenzamos a apoyar a Donbass, la batalla principal ha sido sobre la información. Informar es muy importante, entrevistas como esta son importantes.
¿Qué lecciones pueden aprender los comunistas italianos del asunto Donbass?
Creemos que es muy importante no volver la cara cuando se produce semejante barbarie. El gobierno fascista de Kiev está a sólo tres horas de Roma: pretender no ver no será suficiente. Ese lugar es un laboratorio para la extrema derecha política y, sobre todo, militar. Muchos nazis han estado allí entrenando. ¿Crees que no repetirán el experimento en otros lugares también?
