En una declaración que reproduce la agencia estatal de noticias KCNA, Choe califica ese acto como “una barbaridad antiética que pondrá en peligro la vida de civiles inocentes” y apunta que Washington no repara en medios para lograr la expansión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hacia el este.
Señala, además, que la RPDC se suma firmemente a la repulsa que ha concitado esa decisión en todo el mundo en tanto se trata de un arma de exterminio masivo prohibida a nivel internacional, como reconoció la secretaría general de Naciones Unidas.
Para mantener su hegemonía, Estados Unidos, el mayor suministrador de armas de exterminio masivo y peor criminal de guerra, conoce bien las terribles consecuencias del uso de bomba de racimo y desprecia la vida de civiles pacíficos, afirmó la canciller.
El gobierno de la RPDC y todo el pueblo coreano reiteran su apoyo y solidaridad con la justa causa del pueblo ruso, convencidos de que Rusia logrará la victoria final superando con coraje todas las pruebas y dificultades, apuntó.
