“La OMS logró ponerse en contacto con el personal médico del hospital Al Shifa en Gaza. La situación es grave y peligrosa. (…) Los constantes tiroteos y ataques en esta zona han empeorado la situación que ya era crítica. Lamentablemente, el número de muertes de pacientes ha aumentado significativamente”, escribió Ghebreyesus en la red social X.
Agregó que el hospital ha llevado tres días sin electricidad ni agua y con muy poco acceso al internet, lo que afectó gravemente la capacidad de prestar la atención médica necesaria.
Previamente, el jefe de la OMS había dicho que la organización perdió el contacto con sus coordinadores en el hospital Al Shifa en medio de combates cerca de la instalación médica que, según la agencia Tasnim, fue desconectada completamente de electricidad.
La víspera, el portavoz del Gobierno gazatí, Salama Maarouf, informó sobre al menos 13 muertos por los ataques israelíes contra el hospital.
A su vez, el organismo del Ministerio de Defensa israelí que gestiona los asuntos civiles palestinos (Cogat, por sus siglas en inglés) afirmó que el Ejército de Israel no había rodeado ni atacado al hospital Al Shifa y aseguró que su parte oriental permanece abierta para que todos los que quieren abandonar el edificio puedan hacerlo.
Numerosos países llamaron a Israel y Hamás a detener las hostilidades y negociar un alto el fuego, así como también se multiplican las voces a favor de una solución de dos Estados como única vía posible para lograr una paz duradera en la región.
Las hostilidades han causado hasta la fecha unos 1.200 muertos y cerca de 5.500 heridos en Israel y casi 11.200 muertos, incluidos más de 4.600 menores de edad, y más de 28.000 heridos en la Franja de Gaza, según datos oficiales.
