En un mensaje, el mandatario expresó su solidaridad con el pueblo y el gobierno de Líbano, tras el lanzamiento de aviones israelíes F-35 de más de dos mil toneladas de explosivos contra la zona de Haret Hreik, en el suburbio sur de Beirut.
De acuerdo con Pezeshkian, esta agresión israelí revela la naturaleza del terrorismo de Estado practicado por la entidad ocupante.
Antes, la Cancillería de Teherán señaló que el bárbaro ataque, realizado con bombas estadounidenses, es una flagrante violación del derecho internacional y de la soberanía e integridad territorial de Líbano.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Yemen condenó en los términos más enérgicos la agresión de la entidad sionista contra el suburbio sur de Beirut.
La diplomacia yemenita aseguró que Israel empuja a la región a una guerra regional, cuyas repercusiones no sólo se limitarán a Medio Oriente, sino también al mundo entero.
Según el Ministerio, los estadounidenses hablan de calma para reducir la presión internacional sobre la entidad usurpadora israelí.
El movimiento palestino Hamas renovó la absoluta solidaridad con el hermano pueblo libanés y los hermanos de Hizbulah.
Por su parte, el Frente Democrático para la Liberación de Palestina apuntó que el gobierno nazi-sionista de Israel insiste en encender las llamas de la guerra en la región, «pero su fuego lo quemará», enfatizó.
El Partido Comunista Sirio Unido condenó la agresión israelí contra el suburbio sur de Beirut y aseguró que el ente de Tel Aviv no habría continuado ni cometido crímenes atroces sin el apoyo estadounidense y occidental.
Las incursiones israelíes de esta tarde destruyeron siete edificios residenciales en la zona de Haret Hreik y un reporte preliminar confirmó ocho muertos y más de 70 lesionados.
