El representante permanente adjunto ruso ante las organizaciones internacionales radicadas en Ginebra (Suiza), Andréi Beloúsov, ha señalado este sábado que Rusia apoya la preocupación expresada por China y los países de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) respecto al pacto de seguridad alcanzado entre Australia, el Reino Unido y EE.UU. (AUKUS) con miras a contrarrestar la influencia de China en el Indo-Pacífico.
“En la primera comisión de la ONU [Organización de las Naciones Unidas] se expresaron preocupaciones bastante serias, en particular, por parte de los países de la ASEAN, ya que ellos ven en esa asociación tecnológica trilateral una amenaza para la seguridad regional”, ha puntualizado el diplomático ruso.
Considerando que el pacto militar AUKUS, en la primera fase, prevé la construcción de ocho submarinos de propulsión nuclear para la Armada australiana, Beloúsov ha cuestionado la “entrega hipotética de combustible enriquecido al 90 %” a Australia, por lo que ha pedido más información al respecto a la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) que entre sus tareas tiene que verificar el cumplimiento del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).
El 15 de septiembre, el presidente de EE.UU., Joe Biden, informó de la creación de una “nueva alianza de seguridad y cooperación trilateral” en materia de defensa para el Indo-Pacífico entre su país, el Reino Unido y Australia. La cooperación trilateral, AUKUS, hará que los tres países compartan información y conocimientos en áreas tecnológicas avanzadas de defensa.
Por esta nueva alianza de seguridad, Australia canceló un contrato de 40 000 millones de dólares con Francia para la fabricación de submarinos de propulsión nuclear. De este modo, el país oceánico optó por el acceso a la tecnología del desarrollo de submarinos de Estados Unidos.
Así, Australia, un país no nuclear, se convertirá en el segundo país, después del Reino Unido, en tener acceso a la tecnología nuclear norteamericana para construir submarinos de propulsión nuclear.