En una declaración, el movimiento político y militar libanés anunció la acción con cohetes pesados contra una reunión de soldados israelíes y sus vehículos al este del sitio Al-Samaqa.
Más tarde, Hizbulah confirmó el golpe al emplazamiento militar de Ruwaisat Al-Alam en las referidas colinas, en el sector oriental de la frontera sur.
En la propia fecha, la Resistencia notificó el lanzamiento de un misil Falaq 1 hacia una concentración de uniformados enemigos en las cercanías del sitio Jal Al-Allam.
Antes, sus combatientes llevaron a cabo una operación contra un despliegue de soldados israelíes en las proximidades de la posición Al-Raheb, en el lado occidental de la frontera.
En respuesta a los ataques de Tel Aviv contra las aldeas y civiles del sur, Hizbulah apuntó con cohetes Katyusha a los búnkeres de artillería enemigos en Dishon, ubicado en la región de la Alta Galilea.
Los medios israelíes revelaron que los jefes de las autoridades locales del norte están perdiendo la paciencia ante las afectaciones económicas y el alejamiento de unos 100 mil colonos de sus hogares.
El periódico Yedioth Ahronoth afirmó que los israelíes evacuados del norte todavía están lejos de sus asentamientos y esperan desde hace cinco meses una respuesta de los responsables de la toma de decisiones.
Por su parte, la aviación de Tel Aviv bombardeó las afueras de las localidades de Aitaroun, Houla, Mays al-Jabal, Kunine, Ramieh y la zona de Labouneh, al sur de Naqoura, en el sector occidental.
