“El presidente estadounidense Joe Biden está obligado a responder a la pregunta de si Estados Unidos llevó a cabo su amenaza el 25 y 26 de septiembre de 2022”, ha recalcado este miércoles la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, en su cuenta de Telegram.
Al respecto, ha hecho referencia a las declaraciones que hizo Biden en el 7 de febrero, en el que aseguró poner término al Nord Stream 2, y afirmó que, si Rusia invade y sus tanques o sus fueras vuelven a cruzar la frontera ucraniana, “no habrá más Nord Stream 2” y van a poner fin al gasoducto.
En este sentido, ha ratificado que uno debe ser responsable por sus palabras. “No entender lo que se dice no exime de responsabilidad. Europa debe saber la verdad”, ha enfatizado Zajárova.
El lunes, las empresas de Nord Stream 1 y 2 declararon una caída de presión en los tramos del gasoducto en aguas danesas del mar Báltico. Dinamarca, Polonia, EE.UU. y Noruega expresaron que las fugas en el gasoducto sean consecuencia de actos de sabotaje.
Kremlin ve “absurdo” responsabilizar a Rusia por fugas en Nord Stream
Tras el incidente, Alemania dijo el martes que hay dos escenarios posibles. En el primero, Ucrania o “fuerzas afiliadas a Ucrania” podrían estar detrás del ataque deliberado. La segunda opción es que Rusia hizo supuestamente un ataque de “bandera falsa”, para demonizar a Ucrania y hacer que los precios de la energía de la Unión Europea (UE) suban aún más, lo que Rusia rechaza energéticamente.
En esta línea, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha confirmado este mismo miércoles que acusar a Rusia como responsable de las fugas es “estúpido” y “absurdo”, ya que el gigante euroasiático también sufre de los daños provocados del incidente.
Además, ha puesto de relieve que las líneas del gasoducto están llenas de gas y preparados para el bombeo. “Este gas cuesta mucho dinero y ahora está escapando en el aire”, ha agregado.
Nord Stream es el gasoducto más importante para Europa. Nord Stream 1 se construyó en 2011, mientras que Nord Stream 2, blanco de sanciones y presiones de Estados Unidos, terminó en noviembre de 2021, pero que nunca entró en funcionamiento debido a las tensiones entre Berlín y Moscú por el conflicto en curso en Ucrania.
Rusia representó más del 40 por ciento de las importaciones de gas a los 27 países que componen el bloque comunitario, a través de tres grandes gasoductos: Nord Stream 1, que discurre por el mar Báltico, otro gasoducto que atraviesa Ucrania (Droujba o Amistad), y un tercero a través de Polonia (Yamal).
Polonia agradeciendo a EEUU el sabotaje es una prueba de cargo, en un doble sentido:
1- Porque ganará más dinero por el peaje del gasoducto que pasa por su territorio.
2- Porque siendo más de derechas que el grifo del agua fría creen hacer méritos ante sus amos, ayudándoles en el chantaje/amenaza a los gobiernos europeos que se estaban volviendo atrás, como Hungría.
Y Alemania y sus corifeos ya saben: si en el futuro vuelven a requerir el gas ruso, a construir, ellos, otros gasoductos nuevos mientras dan las gracias a EE.UU. y Polonia por el “gran favor” que les han hecho.
(Aunque desde luego, Rusia cometería una gran estupidez si vuelve, algún día, a venderle gas a Alemania)
La Europa servil acepta creerse que el sabotaje del gaseoducto es obra de Rusia, ignorando que Rusia puede cerrar el envío del gas con solo cerrar las llaves de suministro. Este sabotaje es USA, así doblega mas a sus acólitos a comprar su gas al doble de precio. Los yankis son amigos de sus amigos mientras estos doblen la cerviz de forma continuada. De contrario pasas a ser enemigo.