“Grandes empresas (estadounidenses) del sector financiero (…) están usando el dinero de sus clientes para permitir acciones hediondas de empresas vinculadas a violaciones de los derechos de los indígenas y a la devastación de la selva amazónica”, ha denunciado la oenegé Amazon Watch en un informe publicado este martes.
El informe ha revelado que las empresas estadounidenses BlackRock, Citigroup, JPMorgan Chase, Vanguard, Bank of América y Dimensional Fund Advisors, han invertido en los últimos tres años más de 18 mil millones de dólares en empresas mineras, agroindustriales y energéticas que están involucradas en una “serie de abusos” en la mayor selva tropical del mundo.
Se han investigado las inversiones de esas firmas estadounidenses en nueve compañías brasileñas y multinacionales conocidas por cometer abusos en la Amazonía, según el informe, y que también están acusadas de prácticas nocivas, como expropiación de tierras, violencia contra los grupos indígenas, deforestación ilegal y uso de pesticidas dañinos.
De acuerdo con la oenegé, la complicidad del sector financiero de esas firmas estadounidenses con la desforestación viola los compromisos con el clima y los derechos humanos, expone a sus inversores a grandes riesgos y contribuye de forma dramática a las recientes crisis globales de la biodiversidad y del clima.
En otra parte del informe advierte, de hecho, que el año pasado los conflictos por la tierra causaron un incremento de 135 % en el número de invasiones de territorios y el asesinato de siete líderes indígenas.
Este mismo año diversas organizaciones ambientalistas y de derechos humanos, entre ellas las Naciones Unidas, han acusado al presidente ultraderechista brasileño, Jair Bolsonaro, de promover políticas que debilitan la protección del medioambiente y de los pueblos indígenas.
